Como música y compositora empírica, comprendo la canción como un proceso vivo. Como agua (a veces manantial, a veces rocío, mar, río, lluvia, o niebla) que toma la forma del momento, del cuerpo que la contiene.

Esta serie de 10 videos, de 15 segundos cada uno, pretende deconstruir el conjunto de momentos, palabras, acordes, caminatas a solas, risas, tormentas y tormentos que le dan sustento al proceso de creación de una canción (que nombraré Fuego Nuevo) en el que me encuentro.

La intención es visualizar los distintos elementos sonoros, poéticos, experienciales, etcétera, que, sin seguir una secuencia necesariamente lógica, son parte del espectro que va dando forma a la composición, y que eventualmente hacen sentido en el conjunto que la canción, a manera de jícara, recoge.

Me interesa acercar al público a este proceso a través de una plataforma tan accesible, y en una serie de cápsulas tan breves, ya que estos formatos permiten compartir vistazos, esbozos o ligeras nociones de la complejidad que hay detrás de una composición musical, sin intentar explicar esa complejidad desde un discurso muy elaborado. Anunciar apenas algunas de las piezas que componen las interrogantes que me interesa compartir con las otras y los otros que miren esta serie de videos: ¿cómo suena esta canción? ¿cómo encuentra su principio, y su propio camino? ¿Cuándo, de entre todas las voces y experiencias, esta canción adquiere una voz y un camino propios?

En la contingencia que atravesamos como sociedad en este momento, me parece que es necesario nombrar y reconocer la experiencia humana que compartimos. Tender cada vez más puentes que nos lleven a exaltar la vida; la humanidad y la naturalidad que nos son propias, y a las que el arte nos cerca de forma ineludible.