Tras un terrible acontecimiento, un niño purépecha llamado Tariacuri,  despierta en el principio de los tiempos donde solamente existía la nada y Cueraj´peri (Diosa madre creadora), quien se siente tan sola que da vida a Curicaveri (Dios del sol y de la guerra), y así comienza la creación del universo. Tariacuri, que viene de un tiempo posterior, guía a las deidades mientras narra lo que sus ancestros han contado  sobre la creación del universo. Este viaje onírico  se detiene en la creación de los humanos, que curiosos pero descuidados, comienzan a destruir a Nana Echeri (la Madre Tierra). Un día soñé a Curicaveri reflexiona sobre el cuidado y respeto  a la  naturaleza y sus recursos, apoyándose en la cosmogonía y la tradición oral de la cultura purépecha.